CURSOS DEL IFTI
Introductorios
- Sobre los cursos
- Test
Cursos para Niños y Adolescentes
- Anunció una buena noticia
- Las Parábolas de Jesús
- La Iglesia continúa la obra de Jesús
- Los sacramentos
- El Antiguo Testamento
- El Nuevo Testamento
- Ser cristiano hoy
- La Biblia
- Jesús es el Señor (1-2-3)
Catequesis
- Experiencia y apoyo
- Formación catequética
Básicos de formación
- La fe cristiana
- La fe exlicada
- Lo que creemos
- Lo que celebramos
Presacramentales
- Prebautismal
- Primera Comunión
- Confirmación
- Noviazgo y Matrimonio
Teología general
- Curso Introductorio
- Historia de la salvación (en preparación)
- Introducción a la Teología
- Teología para todos
Teología dogmática
- Dios Creador
- Cristología
Teología moral
- Teología del cuerpo
- Las virtudes
Otras ramas de
la teología
- Mariología
- Patrología
- Eclesiología
- Historia de la Iglesia
- Escatología
- Doctrina Social de la Iglesia
Sagrada Escritura
- Curso de Biblia
(en preparación)
- Introducción a la
Sagrada Escritura
Derecho canónico
- Introducción al
Derecho Canónico
- Derecho Matrimonial Canónico
Filosofía
- Teodicea
- La afectividad
- Antropología Filosófica (en preparación)
- Historia de la Ffía Antigua (en preparación)
- Historia de la Ffía Medieval (en preparación)
Religiones
- Ciencia y Fe:
la armonía perfecta
- Cristianismo
y Religiones
Cursos breves
- La Santa Misa
- La Oración
- El arte de perdonar
- Llamados a la santidad
|
- INSTITUTO DE FORMACIÓN TEOLÓGICA POR INTERNET: Ir al nuevo sitio / Volver a la página de inicio -
i Catecismo
La Señal de la Cruz |
Mi señal de la Cruz |
En el nombre del Padre,
y del Hijo
y del Espíritu Santo
|
En el nombre de Dios Padre, Creador
y de Su Hijo, Jesús, Redentor
y del Espíritu Consolador |
Al persignarse |
Me persigno |
Por la señal de la Santa Cruz,
de nuestros enemigos,
líbranos Señor, Dios Nuestro. |
Por la Cruz de mi Redentor
de todo enemigo traidor
líbrame, Dios Nuestro Señor |
Credo |
Yo Creo |
Creo en Dios, Padre todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra.
Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor,
que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo,
nació de Santa María Virgen,
padeció bajo el poder de Poncio Pilato,
fue crucificado, muerto y sepultado,
descendió a los infiernos,
al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.
Creo en el Espíritu Santo,
la santa Iglesia católica,
la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna.
Amén. |
En un solo Dios, Padre, Todopoderoso y Creador.
De todo lo visible y de todo lo que no se ve: Hacedor.
Y del universo entero –del cielo y de la tierra- formador.
Creo en su Único Hijo, Jesús; Nuestro hermano y Señor.
Antes de todos los siglos, del Padre, eternamente nacido.
Dios, Verdadero e iluminador, a los hombres prometido.
De naturaleza divina; no creado y, del Cielo, venido. Engendrado y, por la humanidad, al tiempo traído.
Hecho hombre como nosotros, fue -es- nuestro libertador.
También, desde el principio, nuestro defensor y protector.
La Virgen Inmaculada Lo engendró como Redentor. María, también madre nuestra, encarnó al Salvador.
Por el Espíritu Santo fue misteriosamente concebido.
Y por una Reina, milagrosamente, “tenido” o parido.
Por nuestras culpas y pecados perseguido y malherido. En tiempos de Poncio Pilato, juzgado e incomprendido. Padeció como si fuera un terrible bandido o malhechor. En la Cruz, ejecutado injustamente y con tremendo dolor.
Fue sepultado Nuestro Amable y Querido Bienhechor.
Enterrado por su Madre y amigos con un inmenso amor.
A los infiernos, a rescatar a los justos ha descendido.
A los servidores buenos, al Cielo merecido, ha subido.
Resucitó, al tercer día, tal como lo había prometido.
Después, por sus propios medios, al Cielo, ascendido.
A la derecha de Dios Padre está sentado El Auxiliador.
Y regresará, al fin de los tiempos, como glorioso juzgador.
De los buenos será, eternamente, dulce poseedor.
Los malos lo rechazarán con odio, envidia y rencor.
Tanto el vivo como el fallecido será medido.
Cada uno recibirá, con justicia: lo merecido.
Su reino, verdaderamente espléndido,
no tiene ni tendrá un final establecido.
Creo en el Espíritu Santo Consolador.
En el Paráclito, Abogado y Santificador.
De la vida y de la gracia, Señor y Dador.
Fruto de una relación de verdadero Amor.
Del amor entre el Padre y el Hijo ha procedido.
Y, como el Padre y el Hijo, por nosotros querido.
Igual adoración y gloria, desde siempre, ha merecido.
Por medio de profetas, Se ha manifestado y proferido.
Creo en la única Iglesia de Jesús: su Santo Fundador.
Santa, aunque me incluye a mí: miserable pecador.
Católica o universal. Cada diócesis con su Obispo-Pastor.
Apostólica. Todos gobernados por Pedro y cada Sucesor.
Confieso que hay un solo Bautismo, de Cristo recibido:
que perdona el pecado original y cualquier otro cometido.
Creo en la Comunión existente entre Santo y Elegido.
Resucitarán quienes han creído en Ti y Te han recibido.
Quienes hayan Comulgado con profundo amor y fervor,
de la vida del mundo futuro será acreedor y poseedor.
Amén
|
Los Mandamientos |
El Decálogo |
1er. Amarás a Dios sobre todas las cosas.
2do. No tomarás el nombre de Dios en vano.
3ero. Santificarás las fiestas.
4to. Honrarás a tu padre y a tu madre.
5to. No matarás.
6to. No cometerás actos impuros.
7mo. No hurtarás.
8vo. No dirás falso testimonio ni mentirás
9no. No consentirás pensamientos ni deseos imuros
10mo.No codiciarás los bienes ajenos. |
1er. A tu Señor amarás.
2do. Su nombre respetarás.
3ero. Las fiestas celebrarás.
4to. A los padres honrarás.
5to. A nadie matarás.
6to y 9no. La pureza cuidarás.
6to y 9no. Nunca jamás fornicarás.
7mo. La verdad no falsearás.
8vo. A ninguno robarás.
10mo. Bienes no codiciarás. |
Los Sacramentos |
Los Sacramentos de la Iglesia |
Bautismo
Confirmación
Penitencia
Eucaristía
Orden sacerdotal
Matrimonio
Unción de los enfermos |
El bautizado, de todo pecado, ha sido liberado.
Como hijo de Dios, en la Iglesia, ha ingresado.
Su corazón, por el carácter y la gracia ha sido marcado.
Con la confirmación el fiel se convierte en soldado.
También, el carácter y la gracia, lo han señalado.
El Espíritu Santo, a su alma, ha sido enviado.
Cuando uno se confiesa, recibe el perdón de su pecado
y recupera, la amistad con Dios, si se había alejado.
A quien ha comulgado: ¡Dios le ha sido dado!
Gracias nutritiva recibe, quién -con Él- se ha alimentado.
Además: alcanzará el Cielo: prometido y esperado.
El sacerdote, en otro Cristo, se ha consagrado.
El carácter y la gracia recibe el ordenado.
Con el Sacramento del Matrimonio, el fiel casado,
es figura de Cristo, de su Iglesia enamorado.
Por la unción, los enfermos son sanados;
en su alma y, en su cuerpo, si así les es dado.
La gracia nos hace, de la Naturaleza Divina, participados;
por un milagro y misterio, a Dios, somos asemejados.
Gracia santificante y gracia sacramental Dios nos ha donado;
tres de ellos imprimen, un carácter, que jamás será borrado. |
El Padre nuestro |
Padre nuestro, perdón |
Padre
nuestro,
que estás en el Cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu reino; hágase Tu voluntad, en la tierra como en el Cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
Amén.
|
Padre , perdón por no considerar más frecuentemente mi filiación divina cada día.
nuestro , perdón por no ver, en tus hijos, a mis hermanos.
que estás en los Cielos y, de un modo particular, con Jesús, en los Sagrarios, perdón por no visitarte con más frecuencia.
santificado sea tu nombre , perdón por las blasfemias, y por el mal comportamiento de quienes estamos a Ti consagrados.
venga a nosotros tu reino , perdón por mi tibieza en el apostolado, perdón por no llevar tu reino a las almas que lo esperan.
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo , perdón por los que, en la tierra, no hacemos tu voluntad.
Danos hoy el pan de cada día , perdón por que, muchas veces, no agradezco el pan de trigo y no valoro como debo el Pan Celestial.
Perdona nuestras ofensas , sí... Señor: perdón, perdón, perdón, perdón, perdón, perdón, perdón con todo el corazón.
como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden , perdón porque, a veces, no olvido, perdón por mi rencor y por mi susceptibilidad, perdón por no tener un corazón generoso.
no nos dejes caer en la tentación , perdón por la cantidad de veces que percibí tu ayuda –en la tentación- y no la aproveché.
y líbranos del mal , perdón por mi mal ejemplo, perdón por el escándalo que dí, perdón cuando me convertí en instrumento del mal.
Amén . Que así sea; perdón por las veces que no he tenido la valentía, la fortaleza y la paciencia para llevar con alegría las contradicciones. |
El Ave María |
Ave María, gracias |
Dios te salve,
María,
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita Tu eres
entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros,
pecadores,
ahora
y en la hora de nuestra muerte.
Amén |
Gracias, Dios, por haber querido crear una mujer tan buena y tan bella: Ella es tu “Obra Maestra”. Ella es, también, nuestra madre; ¡gracias! Dios Te salve, Te saluda Dios y yo quiero agradecer tu “sí”, tu “fiat”, tu “hágase”, tu “aceptación”, tu compromiso, tu entrega, tu fidelidad.
María , gracias Te doy, con todo mi ser, por todas las gracias que me has conseguido y por todas las que me seguirás consiguiendo, de nuestro Padre Dios.
llena eres de gracia y eres, también, Refugio de los Pecadores. Gracias por dejarnos refugiarnos en tu amor.
el Señor es contigo y nosotros también. Gracias por no rechazarnos ni cansarte de tanta indignidad, indiferencia y maldad.
bendita Tú eres , Tú eres bendecida por tu Padre, por tu Esposo, por tu Hijo; también, por todas las generaciones. Gracias, Dios, por quererla así. Gracias a todos los que la quieren con toda el alma.
entre todas la mujeres , Tú, eres a quien he ofrecido mi corazón. Gracias por aceptarlo, por mimarlo, acariciarlo, limpiarlo y cuidarlo.
y bendito es el fruto de tu vientre , gracias por darnos a Jesús. Eres Causa de Nuestra Alegría. La Alegría con tu sangre, con tu mirada, con tu sonrisa. Queremos que Tu Alegría también corra por nuestras venas.
Jesús , gracias por pedirle, en la Cruz, que aceptara ser nuestra madre. Gracias por escuchar siempre lo que Ella te pide. “-Madre, como en Caná, “no tengo vino”, ni piedad, ni espíritu de penitencia, ni ...”
Santa María , gracias por el don de la fe y por la vocación, gracias por mi familia y por mi país, gracias por la Iglesia y por el Papa Juan Pablo II, gracias por la Obra y por mi querido Fundador.
Madre de Dios , gracias por el don de la vida y por la salud, gracias por el pan de cada día, gracias por los amigos y por tanta gente que quiero. Gracias por ser el canal por donde me llegan las gracias.
ruega por nosotros , gracias por tus ruegos, tus plegarias, tus peticiones. Gracias por tu paciencia, por tu fortaleza, por tu perseverancia, por tu amor.
pecadores , sí, pero pecadores arrepentidos. Gracias por aceptar nuestra contrición. Señora, Madre, Reina; ayúdanos a que este dolor se manifieste en buenas obras. ¡Que no quede en un mero propósito!
ahora , que todavía tengo tiempo de merecer; ahora que todavía tengo tiempo de agradecer. Ahora, hoy, ¡ya! ¡Que consiga superar, Madre, las excusas y las cobardías que me detienen!
y en la hora de nuestra muerte , me gustaría que vinieras a buscarme para llevarme al encuentro con Jesús. Gracias por escuchar mi pedido. Ángel de mi guarda agradecé conmigo los dones de la Virgen.
Amén . Así es. Que así sea. Madre mía, mucho me gustaría que, mi vida toda, fuera una ofrenda de acción de gracias a Vos: mi dueña. Amén. |
La Salve |
Mi Salve |
Dios te salve,
Reina y Madre de misericordia,
vida, dulzura
y esperanza nuestra;
Dios te salve.
a Ti clamamos
los desterrados hijos de Eva;
a Ti suspiramos,
gimiendo y llorando,
en este valle de lágrimas.
Ea, pues, Señora,
Abogada nuestra,
Vuelve a nosotros
Esos tus ojos misericordiosos;
y después de este destierro
muéstranos a Jesús,
fruto de tu vientre.
¡Oh clemente,
oh piadosa,
oh dulce siempre
Virgen María
|
Dios te saluda
misericordiosa
Madre y Reina.
Dios te saluda
mi esperanza
vida y dulzura.
Hoy, como hijo
desterrado
Te clamo.
A Ti suspiro
lloro
y llamo.
Abogada mía salvame
mirame y consolame.
A Jesús mostrame
cuando Dios me llame.
Oh clementísima
Virgen santísima.
Oh pidosísima
Madre dulcísima.
|
El Ángelus |
Mi Ángelus |
V. El ángel del Señor anunció a María
R. Y concibió por obra del Espíritu Santo.
V. He aquí La Esclava del Señor.
R. Hágase en Mí según tu palabra.
V. Y el Hijo de Dios se hizo hombre.
R. Y habitó entre nosotros.
|
El arcángel Gabriel anunció a María
Y, por el Paráclito, concibió ese día.
La Virgen, esclava del Señor, decía,
que se cumpla, Tu Voluntad, en la mía.
Y el Hijo de Dios, como hombre nacería.
Y en el mundo, con nosotros, viviría. |
|
ARCHIVOS en MP3
+ Los Santos Evangelios
+ Los Evangelios concordados
+ La Biblia para chicos
+ El Santo Rosario
+ Retiros espirituales
+ Meditaciones
+ Cuentos
+ Conferencias
+ Clases de Teología
+ Los Padres de la Iglesia
+ Lecciones bíblicas
+ Consagración a la Virgen
+ Devoción Sagrado Corazón
+ Juan Pablo II en la Argentina
+ Audios de San Josemaria
ESCRITOS ESPIRITUALES
- Informativos - formativos
- Presentaciones en ppt
- Devocionarios
- Catecismos
- Folletos plegables
- Artículos varios
- Conferencias
- Homilías
- Cuentos para pensar
- La Semana de la Santa
- El hombre de Villa Tevere
- Para Salvarte
- La Sábana Santa
- 40 Conferencias
AGRADECIMIENTOS
- Programa para la Presencia de
Dios
- Ntra Señora de Luján
- San Josemaría Escrivá
- Ernesto Cofiño
- Juan Luis Gallardo
- P. Danilo Eterovic
- P. Jorge Loring, S.I.
- P. Silverio Velasco
- Miguel Ángel Spina
- Agradecimientos
- Razones del sitio
|